La facción Cártel del Noreste de Los Zetas envió un equipo de sicarios desde México a la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo para asesinar a un hombre que presuntamente les había robado drogas. Documentos judiciales relacionados con el caso revelaron que la orden fue dada por la cúpula del cártel, y que se les indicó a los sicarios que “no dejaran testigos”.
El CDN-Los Zetas es uno de los seis cárteles mexicanos recientemente designados como organizaciones terroristas extranjeras por el Departamento de Estado de Estados Unidos. Si bien la organización criminal tiene su sede en Nuevo Laredo y una fuerte presencia en Laredo, Texas, las autoridades locales afirman sistemáticamente que la ciudad es segura.
El caso comenzó en 2021, cuando un hombre conocido como Tico presuntamente robó entre 40 y 50 kilos de cocaína al CDN-Los Zetas y luego traficó cargamentos adicionales a través de sus territorios sin pagar piso ni cuota de protección al cártel. Los documentos judiciales presentados en el caso revelaron que Tico vivía en Laredo, Texas, y que el grupo de sicarios había estado conduciendo cerca de su casa para familiarizarse con los caminos.
En septiembre de 2021, el segundo máximo líder del CDN-Los Zetas, Juan “Juanito” Cisneros Treviño, habló con Noé “El Tocayo” González Martínez, un alto oficial de la organización criminal. En esa conversación, Juanito ordenó al CDN-Los Zetas recuperar la droga robada o su valor en efectivo y ejecutar a Tico.
Por su participación en el caso, González Martínez recibió cadena perpetua más una sentencia adicional de 60 meses de prisión. González Martínez intentó impugnar los cargos penales presentados en su contra, pero perdió el juicio en diciembre de 2023 después de que el jurado deliberara durante una hora, según reveló la Fiscalía de los Estados Unidos a Breitbart News Foundation. Breitbart Texas informó en diciembre de 2023 sobre el juicio por asesinato a sueldo contra El Tocayo.
El Plan
Una vez que recibió las órdenes de Juanito, González Martínez reclutó a otra persona que había trabajado con el CDN-Los Zetas en el pasado. Le ofreció a ese hombre un pago de 40.000 dólares, además de que el cártel le perdonaría deudas previas por drogas.
El hombre debía coordinarse con un grupo de sicarios enviados por el CDN desde México. Los tres sicarios eran Juan Antonio Martínez Padilla, de 60 años; Gregorio González Barragán, de 34; y Rodolfo Reyna Zapata, de 27. Los tres fueron condenados y sentenciados por su participación en el caso. Algunos se declararon culpables con la esperanza de obtener una reducción de la pena.
El hombre anónimo con el que habló González Martínez (Tocayo), quien se esperaba que ayudara a los sicarios, en realidad colaboraba con agentes de la Administración de Control de Drogas de USA (DEA) la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de USA (HSI) y la Policía de Laredo, como fuente colaboradora, según revelaron documentos judiciales. Con la ayuda de este hombre, las autoridades pudieron conocer los planes para secuestrar y asesinar a Tico e iniciaron un operativo encubierto. Los agentes lograron grabar conversaciones entre el informante y Tocayo, quien lo reunió en una estación de autobuses en Laredo, Texas, y luego se subió a la camioneta del jefe del cártel para encontrarse con otro hombre que les proporcionó tres teléfonos desechables y luego fue a reunirse con dos de los sicarios.
Los dos sicarios recibieron instrucciones de Tocayo, quien les dijo que el informante les proporcionaría armas y un vehículo cuando llegara el momento del ataque.
Los agentes federales organizaron una operación encubierta: instalaron un vehículo con armas en el estacionamiento de una tienda local de artículos deportivos e hicieron que el informante les dijera a los hombres que fueran a buscar el equipo para el ataque. Cuando los tres hombres llegaron para buscar el vehículo, los agentes federales utilizaron un equipo SWAT de la policía local para arrestarlos.
A pesar de lo que afirman las autoridades locales, la ciudad fronteriza de Laredo ha tenido casos similares en años anteriores, donde el CDN-Los Zetas ha logrado llevar a cabo secuestros transfronterizos, sin que se vuelva a saber de las víctimas.
En abril de 2023, sicarios del CDN-Los Zetas secuestraron a Erick Tadeo Ramírez de su casa en Laredo, Texas, según informó Breitbart Texas en ese momento. Los sicarios lograron llevar a la víctima a través de uno de los puertos de entrada a México sin ninguna interferencia de las autoridades, a pesar de que intentó escapar de sus captores. Según informes, nunca más se supo de la víctima. En ese caso, Ramírez supuestamente se jactó de haber robado 50,000 dólares del CDN-Los Zetas y afirmó que estaba a salvo porque estaba en Texas. Sin embargo, poco después de la llamada, un grupo de sicarios llegó a su casa y se lo llevó.
Ildefonso Ortiz es un galardonado periodista de Breitbart News Foundation. El es un cofundador del proyecto Cartel Chronicles de Breitbart News Foundation junto con Brando Darby y la dirección ejecutiva de Breitbart. Puedes seguirlo en Twitter y en Facebook. Lo puedes contactar en Iortiz@breitbart.com.
Brandon Darby es el director general y editor en jefe de Breitbart Texas. El es un cofundador del proyecto Cartel Chronicles de Breitbart News Foundation junto con Ildefonso Ortiz y la dirección ejecutiva de Breitbart. Puedes seguirlo en Twitter y Facebook. Lo puedes contactar en bdarby@breitbart.com.
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